Si bien la Delegación Regional de Trabajo de Neuquén dictó la conciliación obligatoria en el conflicto del gremio petrolero y las refinerías, el gremio decidió un compás de espera hasta el lunes 26 de marzo, en tanto se encuentre una salida al enfrentamiento.
El plenario de delegados del Sindicato del Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa determinó el martes el mediodía establecer un paro de actividades, al cual también se sumó el sindicato de camioneros; sin embargo -ayer- al mediodía el Ministerio de Trabajo dictó -por 15 días- la conciliación obligatoria, que fue acatada solo en parte, por el gremio que conduce Guillermo Pereyra.
El propio dirigente manifestó que “desde la organización sindical, dejó de manera explícita en el acta conciliatoria, que en un gesto de buena fe se otorga al sector de las refinerías un plazo de negociación hasta el próximo lunes 26 de marzo, para alcanzar un acuerdo y salvaguardar puestos de trabajos”.
Pereyra expresó que “todavía se encuentran pendientes telegramas de suspensión de puestos laborales, hay una conciliación y vamos a poner todo nuestra energía, para que en el corto plazo la producción de petróleo y gas retornen a la normalidad”, enfatizó.