A través de un comunicado de prensa, el Consejo Directivo de UnTER, expresó “su solidaridad con los productores del Alto Valle que reclaman medidas oficiales que devuelvan rentabilidad al sector de la fruticultura”.
El reclamo es lógico y razonable. La actividad impacta en la economía regional y especialmente en las familias de chacras, dijeron desde le sindicato que conduce Mario Floriani.
“La producción de manzanas y peras patagónicas se realiza en un área de 45 mil hectáreas productivas, donde intervienen de manera directa un total de 60 mil personas. Números que indican claramente la importancia que tiene la actividad en la región”, indica el parte de prensa.
Por último el comunicado señala que “abogamos por políticas de estado que permitan recuperar las economías regionales, que contemplen los derechos del conjunto, tanto de los pequeños y medianos productores y trabajadores del sector. Realidad que conocemos a través de sus hijos con quienes compartimos espacios en las escuelas públicas, especialmente rurales”.