Duros discursos contra la “judicialización y criminalización” de la protesta social se escucharon este mediodía en el edificio del Juzgado Federal con asiento en General Roca, de parte de la dirigencia gremial docente de SUTEBA, ATEN, Unter y CTERA.
Roberto Baradel, dirigente del Sindicato Único de Trabajadores de la Educación de Buenos Aires, SUTEBA, aseguró que “no vamos a aceptar que nos persigan y nos criminalicen en ningún lugar del país, por eso acompañamos a los compañeros de la Unter de Río Negro”.
En similar sentido se expresó Marcelo Guagliardo, titular de la Asociación de Trabajadores de la Educación de Neuquén, ATEN, quién señaló que “el poder judicial argentino cumple dos funciones, procesar a los luchadores sociales y garantizarles la impunidad al poder”. “Le venimos a recordar a la jueza que hay un asesino suelto en Neuquén el ex gobenrador Jorge Sobisch” gritó emocionado Guagliardo con el consentimiento de los casi 300 manifestantes que aplaudian fervorosamente.
Pancartas, bombos y redoblantes pintaron de un color poco habitual la escalinata de acceso al palacio de justicia. Marcelo Nervi, secretario general de la Unter, tomó el micrófono para invitar a la militancia a recordar y homenajear la memoria del docente neuquino asesinado en Arroyito, Carlos Fuentealba, y el maestro Pascual Mosca, quién murió este año luego de protagonizar un vuelco mientras viajaba al piquete que los docentes sostenían en Chichinales.
“Debemos continuar con la lucha y la movilización popular, que es la herramienta que nos permite el fortalecimiento de la organización gremial” dijo.
Stella Maldonado, secretaria general de la Central de Trabajadores de la Educación de la República Argentina, CTERA, manifestó que “hemos promovido una ley de caducidad de los artículos del código civil que permiten el procesamiento de la protesta social”. El secretario de prensa de Unter, Pedro Bichara cerró el acto con fuertes críticas, “le decimos a los Moldes (Alejandro y Leonídas) que operan para las patronales, que los rionegrinos esperamos justicia por los hechos de corrupción, la comida y la leche trucha que consumían nuestros niños”.