La Asociación de Trabajadores de la Sanidad Argentina -ATSA filial Río Negro- desde un tiempo a esta parte enfrenta varios conflictos en las clínicas y sanatorios más pequeños.
La dirigencia gremial ve con preocupación la díficil situación financiera que atraviesan las clínicas cuyo ingreso principal dependen la obras sociales estatales -IPROSS y PAMI-. En Catriel está definido el cierre de la Clínica San Patricio con 25 trabajadores, En Clínica Maternidad de Cincos Saltos el atraso salarial es una constante, al igual que la Clínica Santa Catalina de Allen, donde los trabajadores con un atraso de 2 a 4 meses decidieron esperar hasta el miércoles de la semana que viene para definir medidas de acción directa.
La Secretaria Gremial de ATSA, Gloria Ovejero agregó que “a todas estas situaciones se suma la Clínica Regina que la semana que viene haría formalmente una presentación de preventivo de crisis (20 trabajadores) y el incumplimiento del Sanatorio Alllen con sus empleados- sanatorio adquirido por el Sindicato de la Fruta hace un año- a la fecha no dió inicio a sus actividades, afectando a 15 trabajadores”, ha sido un año muy conflictivo reflexionó Ovejero.