“Se convocará al Comité Confederado para decidir un plan de lucha que incluya un paro general”, dijo Juan Carlos Schmid único orador en el acto de Plaza de Mayo.
El titular del Sindicato de Dragado y Balizamiento aseguró que “no venimos a levantar la bandera de ninguna candidatura no estamos detrás de ninguna conspiración, venimos con una demanda central trabajo digno y salario justo”.
Schmid indicó que “el principal motivo de la marcha es poner en vista la agenda social” y reclamó “por el control de precios sobre alimentos y medicamentos. Entre otras demandas, enumeró; la no intervenciones en sindicatos, rechazo a cualquier reforma laboral o jubilatoria, defensa del modelo sindical y decretar la emergencia social alimentaria”.
La marcha fue convocada por CGT, pero estuvieron las dos CTA, agrupaciones sociales y piqueteras y los partidos de izquierda. Los organizadores estimaron, unos 250 mil manifestantes.
Los que dieron el presente en el escenario fueron Pablo Moyano (Camioneros), Omar Plaini (Canillitas), Abel Frutos (Panaderos), Julio Piumato (Judiciales), Víctor Santa María (Encargados de Edificios), Juan Pablo Brey (Aeronavegantes), Sergio Romero (Docentes), Carlos Acuña (Estacioneros), José Luis Lingieri (Obras Sanitarias), Carlos Frigerio (Cerveceros), Rodolfo Daer (alimentación), Amadeo Genta (Municipales), Sandra Maionara (Médicos), Hugo Benítez (Textiles), Edgardo Muñoz (Dragado y Balizamiento), Miguel y otros integrantes del Consejo Directivo de la CGT.
No subieron al palco; Héctor Daer (Sanidad), Gerardo Martínez (Uocra), Ricardo Pignanelli (Mecánicos), Armando Cavalieri (Comercio), Ramón Ayala (Peones Rurales) y los Metalúrgicos Antonio Caló y Francisco “Barba” Gutiérrez.
Aunque Caló no se hizo presente en el escenario, la UOM movilizó facciones de La Matanza, Avellaneda y Morón, entre otras. Por su parte, Cavalieri aclaró que lideró una numerosa columna en las puertas de la Federación, sobre la avenida Julio Roca, y advirtió que “esta marcha es un llamado de alerta del movimiento obrero; una alerta sobre la necesidad de exigir un futuro con estabilidad política pero sin que se desatienda el costado social y las demandas de los trabajadores”.