El Secretario General de la CGT, Rubén Belich junto otros dirigentes sindicales se reunieron con los directivos de la empresa de capitales brasileros que tiene a cargo el proyecto del viaducto de potasio.
A partir del mediodía de ayer –en el predio del Sindicato de Camioneros de Allen en Ruta 22- Belich, junto a Ricardo Di Clerico de la (UOCRA) gremio de la construcción, Diógenes San Martín de SMATA, Omar Bravo de Comercio y José Ramirez de Farmacia mantuvieron una reunión informativa con los directivos de la empresa brasilera que desarrollará los 350 km de vía férrea, que trasladará el potasio de Malargue (Mendoza) hasta el puerto de Bahía Blanca.
El megaproyecto que abarcará la región de Cinco Saltos hasta Chichinales -en la provincia de Río Negro- no cuenta aún el permiso del CODEMA (Consejo de Ecología y Medio Ambiente) y la aprobación de la audiencia pública que garantizará el inicio de la obra.
La dirigencia sindical dejó entrever la necesidad de avanzar sobre las condiciones y modalidad de trabajo de la empresa y de la contratación de mano de obra rionegrina en su amplia mayoría, además insistieron en la eliminación de campamentos en las afueras de localidades por donde pase el viaducto y se use el transporte de colectivos para su reestablecimiento a los centros poblados y con infraestructura.
Si bien no trascendieron demasiados datos se estima que la duración de la obra podría ser de 2 años y 10 meses y el pico máximo de ocupación se daría al acercarse el plazo de ejecución a los 2 años.
El titular de la CGT resaltó “la predisposición de los directivos de la empresa que dirige el proyecto, para dialogar con el sector que representa a los trabajadores” y agregó que “desde la Central que conduce se ofertó todo tipo de ayuda para la concreción de este importante proyecto que brindará mano de obra calificada, que en un porcentaje muy alto, serán trabajadores rionegrinos”.